El buen vivir, una mirada de los pueblos originarios en el cuidado de la casa común
Fecha
2021Autor(es)
Fiscué Montano, Luis ArielDirector(es)
Palta, Jorge ArmandoMetadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
El Buen Vivir es cuidado, salvaguarda, protección, veneración y conservación común de todo, para la existencia y la pervivencia.
Todo gira como el espiral, que va y vuelve en el tiempo. Este consejo lo dejaron los mayores y se ha transmitido de generación en generación.
En el pensar indígena, la tierra no se explota, no se maltrata, no se destruye. Por el contrario, se cuida, se protege y se ama. Ella da cobija y alimento, ella nutre y da pervivencia. Al presentar una mirada cómo desde el Buen Vivir, los pueblos originarios realizan el cuidado de la casa común, haremos camino, en pro de la salvaguarda de esta casa, desde el la cosmovisión y pensamiento milenario y así mismo, nos uniremos al sentimiento del Papa Francisco (2015) en la Laudato Si’, cuando escribe que “El objetivo no es recoger información o saciar nuestra curiosidad, sino tomar dolorosa conciencia, atrevernos a convertir en sufrimiento personal lo que le pasa al mundo, y así reconocer cuál es la contribución que cada uno puede aportar” (Francisco, 2015,19) Unamos estos dos pensamientos, y luchemos por ir tras las soluciones que ayuden a calmar el dolor de esta madre tierra que llora como si estuviera dando a luz, por todos los ultrajes que sus hijos, nosotros, le hemos causado por generaciones.
El cuidado de la Casa Común, es una responsabilidad de todos los que la habitamos y esto solo se puede lograr desde las practicas armónicas del Buen Vivir, que no consiste en poseer riquezas, ni jactarse del tener mucho a partir de ambiciones ficticias producto de destrucción y muerte, sino, ir en busca de alternativas que ayuden en la recreación de esta Casa Común que Dios creo para nuestro bienestar y nuestra pervivencia.
No dejemos que el pecado que invade nuestro corazón, sea más fuerte que las ganas que tenemos por ayudar en la recreación, conservación sanación de nuestra casa, la madre tierra.
Abstract
Good Living is care, safeguard, protection, veneration and common conservation of everything, for existence and survival. Everything rotates like the spiral, which goes back and forth in time. This advice was left by the elders and has been passed down from generation to generation.
In indigenous thinking, the land is not exploited, it is not mistreated, it is not destroyed. On the contrary, he cares for himself, protects himself, and loves himself. She gives shelter and food, she nourishes and gives survival. By presenting a look at how from the Good Living, the native peoples carry out the care of the common home, we will walk, in favor of the safeguarding of this house, from the worldview and millenary thought and likewise, we will join the feeling of the Pope Francisco (2015) in Laudato Si', when he writes that “The objective is not to collect information or satisfy our curiosity, but to become painful conscience, dare to turn what happens to the world into personal suffering, and thus recognize what is the contribution that each one can contribute ”(Francisco, 2015,19) Let us unite these two thoughts, and fight to go after the solutions that help to calm the pain of this mother earth that cries as if she were giving birth, for all the outrages that her children, we, have caused him for generations.
The care of the Common House is a responsibility of all of us who inhabit it and this can only be achieved from the harmonic practices of Good Living, which does not consist of possessing wealth, nor boasting of having much from fictitious ambitions product of destruction and death, but rather, in looking for alternatives that help in the recreation of this Common House that God created for our wellbeing and our survival.
Let's not let the sin that invades our hearts be stronger than the desire we have to help in the recreation, conservation, and healing of our home, Mother Earth.